GERDA TARO

Entrevista

Diferencias entre los medios de comunicación tradicionales y los new media.

En los productos audiovisuales el resultado es cerrado y, además, poseen una estructura lineal. La asociación entre el producto cerrado y la linealidad se da en los textos escritos y en el mencionado producto visual: Una historia contada mediante una estructura argumental clásica de planteamiento, nudo y desenlace. Y no, esto no queda interrumpido por la utilización del flash back cinematográfico, ya que no por ello el espectador deja de formarse la representación de la historia narrada, que había sido inducida por el autor, en el orden usual.

Tanto los planteamientos narrativos clásicos como los productos más o menos innovadores, son obras cerradas a los que el espectador o el lector se enfrentan con una única posibilidad de asimilación.

Cabe destacar que los medios de comunicación tradicionales no disponen de la posibilidad de que el receptor de la información conteste inmediatamente; en realidad, si desea influir en el mensaje, debe utilizar un medio distinto. Por ejemplo, si quiere compartir su opinión en la prensa, debe enviar una carta –usa un medio distinto más lento.

Los new media corresponden a la aparición de los nuevos mecanismos tecnológicos, sociales y económicos contemporáneos que han ido surgiendo en los últimos 20 años. Facilitan la comunicación, el marketing, la promoción, algunos hábitos e incluso necesidades.  Superan la linealidad y consiguen efectuar un feedback más rápido y eficientemente, usando la misma plataforma para efectuarlo, hacerlo llegar en su justa medida y sin deformaciones.

Constituyen y generan nuevas entidades que estimulan una continua innovación. Con el uso de productos hipertextuales, del cine digital y de los juegos por ordenador,  nos damos cuenta de que cada vez el límite de la capacidad tecnológica va cediendo más y más. Contamos hasta con versiones electrónicas de los periódicos.

Sin embargo, entregar información interesante a las personas que se preocupan por ella el más complicado. Cuanto más crece la tecnología, más crece nuestro modo de consumirla y, por lo tanto, también nuestros hábitos de consumo. (El principal cambio viene dado por las redes sociales.)